Tea Tasting - Como realizar una cata de té

El trabajo de los catadores de té profesionales consiste en apreciar las cualidades de las hojas de té, así como sus particularidades, para elegir las mejores calidades según el mercado al que se dirijan.

Ello implica un proceso muy pautado en el que todos los pasos deben seguirse con exactitud. Al igual que para la cata de otros productos como el vino o la cerveza, lo primero es disponer de una sala acondicionada y una mesa de cata.

• Un técnico prepara la batería de muestras exponiendo en pequeños platos o bols las hojas de té para su observación.

• En una taza dentada con tapa de 150 ml. se colocan 2.8 g de producto y se añade el agua previamente calentada con el hervidor.

• Se deja en infusión durante el rango de tiempo adecuado al tipo de té, pero ligeramente aumentado, para lograr una mayor intensidad aromática.

• Se dispone la infusión en la taza para cata y en ese momento se procede a la valoración visual y olfativa del té en seco, de las hojas ya usadas y de la propia infusión.

• Con una cuchara, los catadores sorben el líquido, moviéndolo por toda la cavidad bucal para obtener la máxima información posible.

• Una vez catado, el té se escupe, y se pasa a la siguiente muestra.

La cata profesional se realiza sin añadir leche, limón, azúcar ni otros elementos, para poder apreciar únicamente las características del producto. En una fase posterior, se puede decidir modificar el gramaje, el tiempo de infusión y los productos que se añaden, para obtener un resultado óptimo con las hojas que se están evaluando. Por ejemplo, es frecuente en catas destinadas al mercado anglosajón, añadir una determinada cantidad de leche, ya que es la forma de consumo preferente en este espacio cultural.

Esta es la mecánica de la cata, que como se puede ver, es accesible para todo el mundo. Solo necesitamos unos cuantos utensilios básicos, unas cuantas muestras y mucha curiosidad. Os animamos a practicar y a compartir vuestras experiencias.